La natación puede ayudarnos a prevenir distintas enfermedades, como las provocadas por las malas posturas. La práctica de la natación nos ayudará a mantener una correcta posición, es ideal para aquellas personas que tengan un trabajo sedentario y pasen mucho tiempo sentados frente al ordenador.
Nadando logramos que el cuerpo tenga una flexibilidad que, lamentablemente, hemos perdido con el paso del tiempo o como consecuencia de una mala postura.
Siempre estamos a tiempo de recuperar la elasticidad si nadamos de manera adecuada. De lo contrario, podemos llegar a tener problemas articulares y musculares.